Una zona metropolitana, que en su conjunto, supera los veinte millones de habitantes. De circulación densa, masiva. Rápida pese a los grandes embotellamientos.
En ese transitar diario en el que he dejado mi habitual Avispa en Madrid cambiándola por el paseo a píe en DF llego a Mazaryk. Una de las grandes avenidas de esta gran ciudad. Equivalente en la Ciudad de México a la llamada Milla de Oro en Madrid. Amplia, Ancha, Larga. Con boulevares centrales en según qué tramo y amplias aceras. Así, toda vez la alcanzo para recorrerla durante un rato de camino a la ofi encuentro un local que llama mi atención. Y un día y otro paso frente a él cuando una mañana un rótulo sobre la fachada principal hace que me detenga y sonría con malicia. Vespa!!!!. Y digo con malicia porque mi subconsciente, ocupado en rastrear y buscar todo indicio que “huela” a moto en una ciudad donde apenas hay, Me hizo fijarme en un lugar en que, hasta el instante del cartel (08 de Diciembre, 8:10 A.M.) nada hubo que me recordara a mi añorada avispilla.
De vuelta en la noche por el mismo camino curioseo en el escaparate y encuentro algunas tablas, sobre caballetes y algo similar a los rollos de telas de las sastrerías, algún cuadro embalado y poco más se adivinaba tras los cristales.
Un día más. De nuevo mi curiosidad me lleva a cambiarme de acera y pasar por delante y ver si eso avanza o es mi imaginación desbordante la que está hilando, hilando y tejiendo una historia que no es tal.
Pasan los días y aquello va tomando forma. Parece una boutique. El suelo con tarima, parabanes con perchas, cuadros colgados sin descubrir…, el mostrador del fondo, el color de las paredes… y esas telas misteriosas sobre los tableros.
Lunes 13, 21:00 horas. Todo apagado en la tienda, ni un cartel anunciando nada. He comentado el tema en la ofi, el grupo de trabajo vivimos relativamente cerca, en el “barrio” y nadie sabe nada.
Ya el martes la Tienda va tomando forma. El cartel de la entrada está plenamente visible y dentro empiezan a verse unas marcas en los laterales del local; los cuadros se adivinan grandes y ya están todos en su sitio. Los focos del techo, los colores … uffff no sé si aguantaré. Siempre paso cuando ya no hay nadie. Bien por ser demasiado pronto en la mañana o demasiado tarde en la noche.
El 15 los cristales de la entrada están tapados. La emoción me puede. Estoy excitado. La curiosidad, me mata. Mi avispilla… me falta. En la misma manzana, en la acera, a unos 25 metros una LX150 de color azul marino metalizado, preciosa, está aparcada. Ayer, cuando comimos en unos grandes almacenes descubrimos que vendían Vespas y también las hindúes LML. Uyyyyyy! ¡Qué peligro!.
Jueves 16 voy a la ofi un poco más tarde y paso por delante de nuevo. Se ve movimiento en la tienda. Están colocando los modelos nuevos. Mi corazón se acelera. Tengo un día complicado y pese a todo querría salir pronto. Llega el la tarde noche, las 19:30, camino hacia casa y según voy llegando al local veo los focos en la calle, la música se oye a una manzana ambiente como en el mejor estreno de Hollywood, Flashes, copas, y… Vespas de que ocupan todo el recinto frontal de la tienda. Perfectamente alineadas en diversas filas y columnas como si de una matriz se tratara.http://picasaweb.google.com/bmwmas/2010VESPAMEXICODF
Abundan las de siempre. Impecables todas. El Vespa Club de México está presente. Siguen llegando algunas y estacionando una tras otra. Las nuevas dentro. Una tienda preciosa en la que la ropa, complementos, y el diseño Vespa, está presente. Predomina el buen gusto aunando con sabia mezcla lo moderno con algún guiño clásico. La música perfectamente escogida, los colores… .Cálida y agradable. Se respira algo más que el puro gusto por lo neoretro de moda. Fuera, en su entrada el sabor vespa se respira en el ambiente. Es ante todo una reunión de entusiastas en torno a nuestros cacharros para charlar sobre ellos y festejar la apertura de un nuevo lugar en el que encontrarnos.
Abundan las de siempre. Impecables todas. El Vespa Club de México está presente. Siguen llegando algunas y estacionando una tras otra. Las nuevas dentro. Una tienda preciosa en la que la ropa, complementos, y el diseño Vespa, está presente. Predomina el buen gusto aunando con sabia mezcla lo moderno con algún guiño clásico. La música perfectamente escogida, los colores… .Cálida y agradable. Se respira algo más que el puro gusto por lo neoretro de moda. Fuera, en su entrada el sabor vespa se respira en el ambiente. Es ante todo una reunión de entusiastas en torno a nuestros cacharros para charlar sobre ellos y festejar la apertura de un nuevo lugar en el que encontrarnos.
Larga vida a nuestras Avispas!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
3 comentarios:
esas avispas...
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C.U. ;-)
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